Ex director de la revista chilena "Punto Final".
Manuel Cabieses Donoso

Ex director de la revista chilena "Punto Final". Estuvo en prisión, exiliado y luego en la clandestinidad durante la dictadura militar. Ex dirigente del MIR.

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manuelcabieses@gmail.com
El partido-bandera del Frente Amplio, Revolución Democrática (RD), nacido en los claustros de la Universidad Católica, se ha ensuciado las manos recurriendo a recursos fiscales para financiar sus actividades políticas y gastos personales.
No hace tanto tiempo que, ante la vergüenza de ver a dirigentes mapuches en prisión para salvaguardar los intereses de los colonizadores modernos, escribí un poema que, entre otros dice: "Huillical, Llaitul y Huenuche, coraje admirable del pueblo mapuche..." Hoy, una nota de Manuel Cabieses, a mí "Que me encuentro tan lejos, esperando una noticia, "Me viene a decir que en mi patria no hay justicia". Llaitul de nuevo en prisión... Triste año aniversario del Golpe de Estado criminal, que ve a gobiernos "democráticos" prolongando el horror de la Conquista.
El fascismo no hace en Chile nada novedoso. Repite su estrategia de siempre: sembrar el miedo. Miedo al desorden callejero, a los asaltantes, al crimen y al reinado de la droga. Su carta de presentación electoral es la mano dura que extirpará esos males sin contemplación. 
El entendimiento antifascista permitiría proteger la Convención y su propuesta constitucional. La Convención es la conquista democrática más importante de este siglo. 
Conocí a muchos demócratas cristianos, incluso en los años de la Resistencia. Fui amigo de Leighton y Andrés Aylwin, valiente defensor de los derechos humanos. Creo que la senadora Yasna Provoste Campillay pertenece a ese linaje moral y político de la Falange. La prioridad democrática es derrotar a la derecha fascista y corrupta. Hay que elegir un gobierno de transición que garantice el éxito de la Convención Constitucional.
Lo ocurrido en Iquique no es solo la barbarie con seres indefensos que hoy avergüenza a Chile. Es repulsivo también asistir al resurgimiento del ideario más tenebroso que ha conocido la Humanidad: el fascismo.